Debate Viernes 3/11/2023, de 18 a 21h
Presentado por: Toni
Según la Encuesta de la Población Activa (EPA) del INE, de los 368.000 puestos de trabajo creados en España en 2022, 348.000 (el 95%) fueron ocupados por personas no nacidas en España.
El economista Miquel Puig asegura que desde hace años los españoles sólo pueden aspirar a los puestos de trabajo que liberan otros empleados que se jubilan pero no a ocupar los puestos nuevos que se crean. El que el nuevo empleo sea ocupado casi en exclusiva por los inmigrantes se debe a que la mayor parte del empleo que se crea es de poco valor añadido y bajos salarios. Por ello la inmigración se concentra en sectores como agricultura, construcción, turismo, cuidados de dependientes, etc.
Según el INE, en los próximos tres años la migración neta que recibirá España será de cerca de medio millón de personas cada ejercicio. Esta llegada masiva de inmigrantes presionará a la baja el mercado laboral y al mismo tiempo tensionará los servicios públicos como sanidad y educación.
También precisará de una infraestructura de inmuebles suficiente para poderlos alojar. En muchos países de nuestro entorno se ha constatado una correlación entre el volumen de los inmigrantes en un territorio y la subida de los precios de los alquileres de las viviendas.
En definitiva, dados los empleos precarios y de bajos salarios que se están creando en España, estos solo pueden ser ocupados por inmigrantes que a su vez demandan muchos servicios públicos. De todo ello los más perjudicados son los españoles jóvenes, poco cualificados y que viven en lugares de precios altos porque ese es el perfil del inmigrante medio.
La conclusion final es que existe un alto riesgo de que la contribución de los inmigrantes al Estado del bienestar pueda ser menor que lo que reciben de este. Por ello habría que ajustar la política migratoria para evitar que esto suceda.